La vendimia de esta primera producción de Vástago se realizó en 2019 de forma manual. La excelencia de la cosecha llevó a dar el primer paso en viñedos que desde 1940 se encuentran en los pagos zamoranos de La Guinda y Los Colmillos de Morales de Toro; con suelos francoarenosos y a una altura aproximada de 700 metros. Su producción no llega a los 2.500 kilogramos por hectárea, lo que se traduce en un bajo rendimiento que bien merece la pena por la calidad que ofrece en cuanto a alta concentración de aromas y color.

“Vástago es hijo y es el primer tallo de una cepa y representa mi ideal de vino mezcla de mi uva, la Tempranillo convertida en Tinta de Toro en la zona, con pequeños toques de Garnacha y Petit Verdot que le confieren elegancia y suavidad gracias a las manos de mi amigo Ángel Luis, que entendió lo que yo quería. Viñas viejas, eternas diría yo, y en cuyos paseos obtengo la tranquilidad del trabajo bien hecho”, destaca Tito Luis.

Con este vino quiere agradecer así a todos cuantos le han ayudado en estos 40 años de profesión. “Dicen que la vida está hecha de momentos y así ha sido la mía. He disfrutado de mi trabajo y de cada instante. El vino me ha permitido recorrer España entera, donde he encontrado cientos de amigos. Cada copa ha sido una experiencia y cada sorbo una oportunidad de descubrir sensaciones nuevas”, cuenta el autor de Vástago en la presentación de su vino ideal.

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