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Malleolus 2019 de Emilio Moro: una añada para el recuerdo

Malleolus 2019 Emilio Moro (Producto) - GastroMadrid.png

13.10.21 Roberto Buscapé

Bodegas Emilio Moro, D.O. Ribera del Duero, lanza al mercado la añada 2019 de Malleolus, una de sus referencias más significativas. El nombre de esta etiqueta proviene del vocablo en latín que significa «majuelo», nombre que se emplea en la zona en la que se sitúa la bodega para referirse a los viñedos. Este tinto, cuya personalidad y carácter resultan reconocibles, proviene de cepas crecidas en suelos arcillosos, calizos y pedregosos en la localidad de Pesquera del Duero (Valladolid). Malleolus 2019 ha sido elaborado con una selección de uvas de viñedos viejos que presenta un gran equilibrio tras una maduración óptima.


En palabras de José Moro, presidente de Bodegas Emilio Moro y Bodegas Cepa 21 y bodeguero de tercera generación, esta «será una añada para el recuerdo, posiblemente una de las mejores que hemos visto en estos últimos diez años». Lanzada hace más de dos décadas, la etiqueta Malleolus marcó un hito en el sistema tradicional de elaboración de Ribera del Duero desvinculando su categoría del tiempo que permanece en barrica y asociándolo al valor de la añada. Esta 2019 en concreto, tal y como señala José Moro, «tiene todas las características para ser una añada brillante: el perfecto equilibrio entre potencia, frescura, madurez y complejidad» y añade que «es claramente una añada que se presta a la guarda, porque estoy seguro de que Malleolus 2019 va a evolucionar en botella y nos va a sorprender aún más».


Malleolus 2019 está elaborado con uva 100 % Tinto Fino (Tempranillo) macerada durante dieciocho días con los hollejos. La fermentación maloláctica se lleva a cabo en depósitos de acero inoxidable y la crianza en barricas de roble francés de 500 litros en las que permanece hasta el momento de embotellarse. Una elaboración respetuosa con la personalidad de la variedad.


Visualmente, Malleolus 2019 respeta las características propias de su estilo. Presenta un color muy cubierto, rojo cereza. En su fase olfativa destacan las notas maduras, con buen equilibrio y los aromas logrados por el envejecimiento en barrica de roble francés, que remarcan la personalidad de la Tempranillo. Se trata de un vino con una profundidad aromática destacable, con mucha densidad y un impacto frutal propio de esta variedad. Una vez en copa, revela una gran riqueza de matices y una evolución excepcional. Posee una gran presencia en boca, haciendo de este un vino voluminoso y con gran estructura. Se caracteriza por un tanino que llegó a bodega muy maduro y que lo convierte en una referencia de paso muy largo seguido de un retrogusto duradero. 

emiliomoro.com

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